lunes, 15 de julio de 2024

LARROCERÍA: El senyoret en su punto

LARROCERÍA, a 13 de julio de 2024, en la calle Colmenares n.º 7 de Madrid, distrito Centro, en el barrio de la Justicia, lo que conocemos como barrio de Chueca. El restaurante está justo detrás del edificio que hoy es el Ministerio de Cultura, el cual acoge en un rincón de su plaza una escultura de Chillida, conocida como “Lugar de encuentros”.

El nombre de Colmenares se debe a que en el año 1881 se abrió esta calle en los terrenos que eran propiedad de Segundo Colmenares, VII marqués de Olivares, quien también era propietario del conocido como Teatro del Circo, que más tarde ocupó el ciro Price en lo que hoy es la plaza del Rey y que acoge parte de las oficinas del Ministerio de Cultura.


Es hora de disfrutar de una buena paella o un buen arroz en Madrid, y para eso hemos escogido un restaurante en pleno centro, que ofrecen sabores tradicionales trabajados con productos frescos traídos desde Valencia y Alicante.

Podemos encontrar chipirones, mejillones, embutidos de Pinoso (Alicante) y por supuesto, paella valenciana, con pollo, judía verde y garrofón; arroz a banda o arroz del senyoret con chipirones, gambones y mejillones.

Nos encontramos con un local muy acogedor, con paredes revestidas de madera y piedra o pizarra y con posibles armarios cuyas puertas se sustituyen por unas coloridas persianas de un discreto color azul.

Interior de Larrocería

En el día de hoy no ha lugar a discusiones, porque hay que escoger entre paella valencia o arroz del senyoret, y nos decidimos por el arroz cómodo del senyoret. Y para acompañar a tan rica comida, nos hemos pedido un vino blanco no muy fuerte, un vino de la zona valenciana llamado “Mala vida”, con una etiqueta en la botella muy simpática, que nos quiere recordar esos pequeños detalles que nos hacen la vida un poco más feliz, de lo bueno de la vida y cómo poder disfrutarla: viajes, música, buena compañía,...

Vino Mala vida

Junto con el pan nos sirven unas aceitunas sin hueso algo sosas, para hacer tiempo mientras nos llegan las viandas.


Aperitivo de aceitunas

La idea principal es pedir un entrante o dos, para ir abriendo boca mientras se hace el arroz, así que nos decidimos por una ensaladilla rusa y unos mejillones a la marinera, peo el camarero, muy atento, nos avisa de que le parece mucha comida; así que optamos por degustar solamente la ensaladilla rusa, que nos la sirven muy bien colocada en su forma redondeada, con unos buenos trozos de ventresca de atún por encima y no a saborear entre patata y zanahoria. También advertimos la presencia de trocitos diminutos de cebolla cruda que crujía en cada bocado. Y la mayonesa, puesta en su justa medida, porque ni sobraba ni faltaba. Un buen comienzo culinario.

Ensaladilla rusa

No hemos tenido que esperar mucho rato y nos han colocado sobre la mesa una paellera pequeña con nuestro arroz del senyoret, con un bonito color tostado, que supongo se ha obtenido de la cocción de pescados y mariscos para hacer el fumet, y en el que podemos ver entre los granos de arroz los mejillones, los gambones y los chipirones. Aunque la paellera viene humeante, está lista para comer. Deliciosa.

Paella del senyoret

Según cuentan, la paella del senyoret debe su nombre a que es una comida para señoritos, ya que el marisco ya viene limpio, los gambones pelados, los mejillones sin concha y los chipirones ya cortados en trozos pequeños, de tal forma que no hay que mancharse las manos en pelar nada, sin esfuerzos. Como unos señoritos.

En los postres nos decidimos con una estupenda tarta de queso, muy jugosa y con una capa tostada por encima señal de que ha podido ser pasada por el horno, increíblemente buena, y un flan de torrija, elaborado a base de pan, huevos, leche y canela, mezcla a la que se le añade la piel de naranja y de limón antes de la cocción, para darle sabor, aunque más tarde se retira. Notamos el sabor de la naranja pero no de la canela. Este postre viene acompañado de una rodaja de naranja envuelta en chocolate 

Tarta de queso y flan de torrija

El servicio de atención a los comensales muy atento, contestando con interés a nuestras preguntas.

En cuanto a la señalización de los aseos, muy normales, aunque es divertida la diferencia de la colocación de los lazos, en la cabeza o en el pelo las señoras y en el cuello los señores, tipo pajarita.





4 comentarios:

  1. Que bueno todo, y eso se señoritos jajajajaja, a ti ni al pelo, que tu para esas cosas eres muy señorita, y que decir de os postres, riquíiiiiiiiiiisimos, me quedo con todo y hasta la próxima que esta se me ha hecho muy corta , un besazo

    ResponderEliminar
  2. Qué pasada de comida!!! Muy rico todo, a mí el arroz me priva en todas sus modalidades!!!
    Curioso lo del lacito!!!!

    ResponderEliminar
  3. Yo con esta comida no fallo me encanta y el arroz del señorito lo comí la primera vez en el puerto de santa maría en Cádiz lo único que allí te lo ponen en una olla de barro y caldosito. Muy buena comida

    ResponderEliminar
  4. Uhmmm q rico ...el arroz de cualquier forma. Yo habría cogido la paella por aquello del "chupeteo" jajaja. El arroz tenía una pinta estupenda

    ResponderEliminar