lunes, 8 de septiembre de 2025

VOLCANES II: Sorpresa nicaragüense en la sopa de res

VOLCANES II, a 6 de septiembre de 2025, en la calle Movinda n.º 1 de Madrid, calle que mide 217 metros y pertenece al barrio de Simancas, en el distrito de San Blas-Canillejas.
 

El restaurante Volcanes II dedica su gastronomía a Nicaragua, sobre todo, y a fomentar la cultura culinaria de los países de América Central. Así podemos degustar tacos, frijoles, pupusas (comida típica de el Salvador consistente en una tortilla de harina de maíz rellena de carne, frijoles o verduras), sopa de res, carnes asadas, zumos naturales, buñuelos de yuca o charamuscas (dulce típico de Guanajuato, México). 
Nos encontramos con un local sencillo, con una decoración compuesta por un canto a la nación nicaragüense con su correspondiente bandera. Mesas con monomantel de papel, servilletas también de papel y sillas de madera cómodas.
 
Interior de Vocanes II

Seguimos en el verano astronómico y hace calor en Madrid en el día de hoy, y puesto que en Volcanes II ofrecen cókteles y zumos naturales de frutas, empezamos por refrescarnos con un zumo de mango y otro de guanábana, mientras nos ponen un pequeño aperitivo de patatas fritas y un combinado de apio y zanahoria rallados aderezado con una salsa algo picante. 

Aperitivo de patatas fritas y verduras picantes

La guanábana es una fruta tropical que por fuera se asemeja a una pitaya de color verde y por dentro recuerda a la chirimoya. 

Sumo de guanábana

Cuando viene el agradable camarero a que le digamos que nos apetece comer, le comentamos que nos gustaría probar la comida típica de Nicaragua, por lo que nos comenta que podemos pedir unos tacos de pollo y de ternera para compartir, tacos con forma de rollito y que por dentro contienen una sabrosa carne de ternera cortada en tiras muy finas y otra con suave pollo con pimiento. Los rollitos vienen aderezados con esa mezcla de zanahoria y apio cortada en juliana y con unas gotas de salsa mayonesa y ketchup. 

Taco de ternera

De segundo seguimos con los platos típicos de Nicaragua con una sopa de res, que viene algo caliente y que en su sabroso caldo podemos encontrar un trozo de morcillo de ternera, una patata, trozos de yuca y calabacín y un trozo de plátano maduro. La verdad es que ha sido una sorpresa muy agradable la presentación de esta sopa en verano, que aunque tiene una presencia algo basta, muy poco fina, por los pedazos tan grandes que la componen, ha resultado deliciosa. 

Sopa de res

El otro plato típico del lugar ha resultado lo que han llamado un Volcán, que no sino lo que aquí en España entendemos como plato combinado, a base de trozos de carne de cerdo y de ternera, yuca, queso fresco y queso frito, plátano frito y arroz con frijoles (también conocido como gallo pinto). 

Volcán

La carta de postres es escasa, pero nos atrevemos a pedir un Tres Leches, pero resulta que nos les quedaba, así que optamos por probar un hojaldre típico nicaragüense, que más que una masa hojaldrada, parecía una galleta de pasta dura y se ha quedado la mitad en el plato porque no nos ha resultado muy apetecible.

Hojaldre nicaragüense

Con relación a la señalización de los aseos, solo resta decir que ha resultado divertida, sin que desentone en el local en donde en este sábado de septiembre se ha desarrollado nuestra experiencia culinaria.



lunes, 18 de agosto de 2025

EL CARBÓN DE GRANADA: Calidad del producto y buen rodaballo

EL CARBÓN DE GRANADA, a 15 de agosto de 2025, en la calle Antonio López n.º 246 de Madrid. La calle Antonio López se extiende a lo largo del barrio de Comillas, Moscardó y el de Almendrales, en los distritos de Carabanchel y Usera; va desde la glorieta del Marqués de Vadillo hasta la glorieta de Málaga, en donde se ubica el hospital Doce de Octubre.

Antonio López y López es también conocido como Marqués de Comillas, ya que fue dueño del suelo en donde en la actualidad se asienta el barrio de mismo nombre. Con sólo 14 años huyó a Cuba tras una riña callejera, y allí se casó con una rica heredera que le permitió crear un imperio naviero, la Transatlántica o el banco Hispano-Colonial. El marquesado de Comillas le fue concedido por el rey Alfonso XII por su inestimable ayuda en la restauración borbónica tras el fracaso de la primera república.

En El Carbón de Granada vamos a encontrar platos típicos del mar y sus mariscos: almejas, pulpo, chipirones y calamares o bogavante, así como piezas muy interesantes de la huerta, como el tomate rosa, setas y alcachofas, y carnes y pescados a la parrilla (lenguado, bacalao o chuletillas de cordero).


Nos encontramos con un local moderno, con mucha luz porque tiene grandes cristaleras que dan a la misma ancha calle de Antonio López, con sillas cómodas y con mesas con esa especie de mantel para dos, con sus copas y vasos, el pan ya servido en su plato y con un salero que contiene sal blanca y sal negra, esta sal negra de sabor muy intenso.

Interior de El Carbón de Granada

Como es un día de intenso calor, nos pedimos para refrescarnos un vermut y un tinto de verano, pero que no tenga mucho hielo, el suficiente para que esté frío, pero no helado.


Y mientras damos el primer sorbo a los refrescos, seguimos contemplando el local en done vemos desde nuestra posición parte de la cocina en la que se afanan dos personas y ese mostrador lleno de tomates y pescados. 

Viendo la carta, uno de los amables camareros nos pone en un platito unas gotas de aceite de oliva, que una vez probado con un poco de pan ha resultado un poco ácido al paladar. Y mientras seguimos mirando la carta y nos decidimos, nos han deleitado con una ración de boquerones fritos, uno de mis platos de pescado favoritos.

Fritura de boquerones y plato con aceite

Como en este día 15 de agosto hace tanto calor en Madrid, nos hemos decidido por empezar nuestra experiencia culinaria con una rica ensalada de tomate rosa con ventresca de atún y acompañado de pimiento rojo asado y rodajas de cebolleta, cebolla que por cierto picaba un poco. La mezcla de esa fina rodaja de tomate rosa con un poco de ventresca, cebolleta y un poco de pimiento asado, todo en su justa medida de sal, vinagre de Módena y aceite ha resultado delicioso. Podría estar comiendo tomate rosa todos los días, ese tomate que se cultiva en la localidad oscense de Barbastro y que tiene esa forma no muy uniforme y ese color no tan rojo tan característico.

Ensalada de tomate rosa, ventresca, pimientos y cebolleta

Otro entrante que nos apetecía probar, y para intentar compararlos otros platos más nuevos y originales, o que hemos comido en otros locales, han sido una mollejas de cordero lechal salteadas con espárragos trigueros. Esas mollejitas tan pequeñas acompañadas de eso trozos de espárragos trigueros ha resultado una combinación muy sabrosa e interesante.

Mollejas de cordero lechal y trigueros

De entre todo el marisco de buena calidad que ofertan en El Carbón de Granada, hemos aprovechado para probar una zamburiña aderezada de mantequilla al carbón y una crema de ajo negro.

Zamburiña con mantequilla y ajo negro

Como plato principal, hemos dudado entre pedir una merluza en salsa verde o un rodaballo y al final nos hemos decantado por probar el rodaballo a la parrilla de carbón para compararlo con otro rodaballo que nos entusiasmó y que comimos en el restaurante Jerónimo, mexicano para más señas, situado en la plaza de Celenque. 

El camarero ha traído y nos ha mostrado el rodaballo asado a la parrilla y entero, y él mismo lo ha troceado y nos lo ha servido en el plato. Y con el recuerdo aun en la mente del primer pescado, el que nos han servido en El Carbón de Granada, con sus ajitos y su pizca de guindilla y su aceite de oliva, que junto con el jugo que pueda soltar el rodaballo han emulsionado un pil pil de sobresaliente. Perfecto en su elaboración y de sabor.

Rodaballo a la parrilla

Junto con el rodaballo nos han servido unas patatas panadera con pimiento para acompañar al pescado.

Patatas panadera

Si en un principio habíamos pensado pedir otro entrante más, ha quedado claro que con estos platos hemos tenido suficiente, pero no podíamos irnos del restaurante sin probar la tarta de queso templada al carbón, que ha resultado tan cremosa, tan cremosa, que se deshacía en la boca y hemos dado por bueno el esfuerzo que le hemos dado al estómago. Podemos pensar que la tarta estaba elaborada con algún tipo de queso crema al que se le ha añadido algún tipo de queso más curado.

Tarta de queso templada al carbón

Y hemos terminado la experiencia del mes de agosto con un chupito de manzana sin alcohol y otro de crema de orujo, como regalo de la casa.

Con relación a la señalización de los aseos, llama la atención el color anaranjado del cartel así como la forma original de destacar la silueta de la mujer, sobre todo.





lunes, 7 de julio de 2025

O´CALDIÑO: Esas navajas gallegas y esas croquetas de 10

RESTAURANTE O´CALDIÑO, a 5 de julio de 2025 en la calle Lagasca n.º 74 de Madrid.

La calle Lagasca, paralela a la calle Velázquez y a la calle Serrano, atraviesa los distritos de Salamanca y Chamartín y recorre los barrios de Recoletos, El Viso y Castellana.

La calle Lagasca debe su nombre al botánico Manuel Mariano Lagasca y Segura, nacido en el año 1776 en un pueblo de Zaragoza, fallecido en Barcelona en el año 1839 y que fue director del Jardín Botánico de Madrid.

Después de nuestra experiencia de junio en un restaurante coreano, en este mes de julio nos quedamos en España para disfrutar de la gastronomía gallega en estado puro, ya que en O´Caldiño nos sirven los productos frescos del la zona traídos día a día desde la costas gallegas, para disfrute de los habitantes de la villa y corte y de sus visitantes.

O´Caldiño abre sus puertas en Madrid en el año 1973 de la mano del gallego Modesto Gómez, nacido en el pueblo de Santa Marta de Ribarteme.


Aquí nos ofrecen productos de primera calidad de la zona gallega pero añadiendo en su elaboración nuevas tendencias culinarias, sin dejar de degustar pescados y mariscos (pulpo, percebes, navajas, almejas, zamburiñas, carabineros,…) que se reciben a diario de las mejores lonjas gallegas, así como las carnes de la tierra (ternera o lacón, por ejemplo).

En definitiva podemos encontrar empanadas rellenas de bacalao con pasas o de chipirones, por ejemplo, caldo gallego y pulpo a la gallega, pescados como el bacalao, raya o la merluza a la gallega, lacón con grelos o entrecot de ternera.

No podemos olvidarnos de los vinos, Ribeiro y Albariño, que sirven en su justa temperatura.

Nos encontramos con un restaurante con una decoración armoniosa, con paredes forradas de madera y sobre ellas, cuadros de marinas y bodegones. Mesas con mantel blanco y debajo y sobre las sillas, fundas de un azul cobalto que le da al local un ambiente muy acogedor.

Interior de O´Caldiño

Mientras degustamos un vermut gallego Petroni, vermut que se fabrica en Padrón y que tiene un elegante sabor, aperitivo que viene acompañado de unas aceitunas aliñadas con cebolla y pimiento, miramos la carta para decidir si tomamos carne o pescado, o bien algún entrante frío o caliente. De paso nos van colocando la cesta con rebanadas de pan gallego y que lleva también una especie de colín pequeño y gordito con sabor que parece haber sido elaborado con aceite. rico-rico.


Nos decidimos por probar varios platos para compartir como entrantes, y dejamos las carnes y los pescados para mejor ocasión. Y también nos atrevemos con un albariño de la casa fresco par acompañar los platos de hoy. Por cierto, que el camarero ha dado a probar el vino a la mujer y no al caballero sentado en la misma mesa, y le he comentado que como no suele ser habitual, el hecho me ha llamado mucho la atención.

Para empezar nos sirven un salmorejo con tartar de gambones; sobre una buena capa de salmorejo muy suave en la que se han escapado semillas de sésamo, de chía y algún tomate cherri, aparecen los gambones pelados y partidos en trozos muy pequeños; cucharada de salmorejo con semillas y trozos de gambón con ese fuerte sabor a mar que se aprecia en la boca, ha resultado delicioso.

Tartar de gambones con salmorejo

Seguimos disfrutando de unas croquetas de pulpo sobre una mayonesa de kimchi, esa crema que se elabora con col fermentada y que tiene un muy ligero toque picante, y suaves hilos de chili, y tan suaves que parecían hilos de azafrán.

Después de degustar estas croquetas llegamos a la conclusión de que las podríamos seleccionar como unas de las mejores que hemos probado a lo largo de toda nuestra experiencia culinaria.

Croquetas de pulpo con mayonesa de kimchi

En todo buen restaurante gallego no podemos dejar de degustar algún marisco y aunque el camarero nos habla de las bondades de las almejas, de los mejillones y de las gambas, nos decantamos por probar una navajas con ajo y perejil, con su carne tierna y suave y que invita a mojar pan en esos restos de aceite ajo y perejil que han quedado en el plato.

Navajas gallegas

Como la ración de navajas nos ha parecido algo escasa, la hemos acompañado con dos ostras de buen tamaño y con el inconfundible sabor a mar que deleita a los más marisqueros.

Ostras

Otro de los entrantes que nos apetecía catar ha sido la ensaladilla con ventresca de bonito y encurtido de piparras. Para mi gusto, le faltaba algo de mayonesa y a la piparra le sobraba algo de picante.

Ensaladilla con ventresca de bonito

Para terminar nos han servido unos chipirones braseados con una vinagreta de pistachos verdes, que venían acompañados de unas rodajas de patatas cocidas en su punto y unas cuantas hojas de lechuga. El plato peor conseguido, con unos chipirones algo blandos, que resultaban en la boca algo babosos. Tendríamos que haber empezado con este plato y terminar con la croquetas, por ejemplo, y habríamos salido más contentos con el final de esta comida tan estupenda. Es mejor ir de menos a más, que de más a menos en calidad y gustos.

Chipirones con vinagreta de pistachos

De postre nos hemos pedido una tarta de queso horneada acompañada de unos pegotes de nata montada, tarta que ha resultado muy cremosa y suave, en su justo punto de dulzor y un flan de requesón, que más que flan parecía un trozo de queso blanco, por la textura del postre, acompañado de galleta desmenuzada y salsa de frutos rojos. Mejor la tarta de queso que el flan de requesón.

Flan de requesón y tarta de queso horneada

Para terminar, y como siempre, la señalización e los aseos, muy elegante, como corresponde al lugar elegido en este mes de julio para disfrutar de nuestra experiencia culinaria.




lunes, 16 de junio de 2025

KUILI KOREAN BBQ USERA: Comida coreana entre tanta oferta china

 KUILI KOREAN BBQ USERA, a 14 de junio de 2025, en la calle Gabino Jimeno n.º 11 de Madrid.

Gabino Jimeno es una calle del distrito madrileño de Usera, en el barrio de Moscardó. Gabino Jimeno y Ganuzas fue un músico, compositor y pianista, nacido en Logroño en el año 1853 y fallecido en el año 1931. Parte de su etapa formativa la pasó en Madrid, pero terminó asentándose en la ciudad de Huesca.

Usera se ha convertido en un barrio multicultural, en donde podemos disfrutar de las comidas más variadas y variopintas del mundo; encontramos restaurantes chinos cantoneses, de hot pot, ecuatorianos, nicaragüenses, colombianos, aunque en el día de hoy vamos a probar la comida coreana del restaurante Kuili Korean BBQ Usera.


Nos encontramos con un restaurante bastante amplio para lo que suelen ofrecer los locales del barrio, limpio (aunque hay que decir que no queda muy bien dejar las cajas de las bebidas cerca de la entrada) y bien atendido con personal que habla el castellano con bastante fluidez y con un servicio en las mesas rápido y eficaz.

Interior de Kuili Korean BBQ Usera

Como curiosidad, decir que las servilletas están colgadas de un gancho por encima de nuestras cabezas y los platos, vasos y palillos que utilizamos son de acero inoxidable.

Cuando nos sentamos, nos explican cómo hay que pedir los platos, todo a través del móvil a través del código QR, y que nos van a servir una serie de salsas que costarán dos euros, aunque no las hayamos pedido, por lo que intuimos que toda la carta que ofrecen tiene que ir acompañada de estas salsas para potenciar el sabor. Al mismo tiempo nos ponen sobre la mesa una especie de parrilla eléctrica en donde tendremos que cocinar las viandas que hayamos pedido y en los laterales de la misma nos ponen dos cremas de queso distintas, una de ellas con maíz, queso que, poco a poco, se irá fundiendo con el calor. Al tiempo, vamos notando el calor que emana de la parrilla aunque tengan puesto el aire acondicionado.


Junto con unas cervezas de la marca CASS, que entiendo será coreana, nos van poniendo esas salsas, unas picantes a base de ajo o kimchi, que es una especie de col asiática  fermentada, por ejemplo, y otras que no son picantes; además nos ofrecen unos cuencos con una crema de calabaza, servida caliente y en su punto de espesor y sal, una bola de puré de patata que más parecía un helado de vainilla, un bol con hojas de lechuga rizada, bambú y tofu. Todo ello para combinar y empapar las carnes y demás aderezos que hemos pedido de la carta.

Platitos con distintas salsas y aderezos

Y ya metidos en materia, lo primero que nos sirven es un arroz frito estilo coreano, con kimchi, una rodaja de lo que parece jamón o carne y un huevo frito, pensando que sería un buen acompañamiento a las carnes. Sabroso y algo picante.

Arroz estilo coreano

Seguimos con un plato de falda de ternera cortada en láminas muy finas que luego asaremos en la parrilla, comprobando que está cortada tan fina que con unos segundos de calor bastará. Esta carne nos ha apetecido acompañar de unas rodajas de boniato. Bocado de falda de ternera, con el boniato asado en su punto y mezclado con alguna de las salsas ha resultado sorprendentemente bueno.

Boniato y carne en crudo preparado para asar

Le hemos añadido a la mañana otro plato de carne para asar en esa especie de parrilla, plato al que en el restaurante han dado en llamar Tres hermanos, en el que nos ofrecen una pieza de panceta, otra de aguja de ternera y otra de secreto, que tras asarlo y mezclarlo con las distintas salsas, o acompañado del bambú o el tofu sobre la hoja de lechuga, ha resultado muy apetecible. El plato viene acompañado de una gran media seta y otra media cabeza de ajo.

Tres hermanos: panceta, secreto y aguja

Llegados a los postres y después de una comida original y diferente, nos damos cuenta de que sólo ofrecen mochis, y como no nos apetece, decidimos probar algún otro postre junto con un café en alguna de las muchas cafeterías chinas que pueblan el barrio.

La verdad es que de un restaurante coreano en Usera no esperaba que la comida fuese de mucha carne y para cocinar en el momento, aunque supongo que será una de las muchas variedades que puede ofrecer la gastronomía del país.

Con relación a la señalización de los aseos, es lógico y normal que el nombre esté escrito, supongo que en coreano, junto con la figura de un y una joven, en las distintas puertas.




miércoles, 21 de mayo de 2025

SOMOS: Calidad con vistas a la Gran Vía

SOMOS, a 17 de mayo de 2025, en la plaza de España n.º 18, Edificio Madrid, planta II, restaurante del hotel Barceló, entre los distritos de Centro y Moncloa-Aravaca, barrio de Argüelles.

Esta céntrica plaza de España fue conocida hasta el siglo XIX con el nombre de plaza de San Marcial, hasta su reorganización urbanística del siglo XX en la que empezó a ser conocida como Plaza de España

El chef Jorge Lacera que capitanea este restaurante, ofrece carnes y pescados de temporada, pero lo más interesante en el día de hoy es la ubicación del restaurante, con vistas a la plaza de España y a la Gran Vía. El interior ha sido decorado por el madrileño Jaime Hayón.


Y si hace unos meses disfrutamos con una muy interesante comida en un restaurante con vistas a la plaza de Oriente, en este mes de Mayo lo hemos hecho con un local que ofrece unas estupendas vistas a la plaza de España y a la Gran Vía, la calle de los grandes espectáculos y teatros de la ciudad.


La mesa en la que nos sitúan se abre con una gran cristalera a la Gran Vía, plaza de España y edificio España, hotel Ríu, en una mesa no muy grande, sin mantel pero con servilletas de tela, con copa y vaso para la bebida, pero con sillas muy cómodas.


El ambiente es muy agradable, porque aunque el local es bastante espacioso, hay poca gente comiendo, por lo que no había prácticamente ruido y se ha comido muy a gusto. El local está separado por varias cristaleras que hacen pequeñas zonas independientes compuestas por tres o cuatro mesas, creando así varios compartimentos individuales y acogedores.

Mientras miramos la carta, nos pedimos un vermut que nos sirve gentilmente la camarera en la mesa trayendo la botella, y no como en otros sitios, que traen el aperitivo ya directamente en el vaso. Nos sorprende el agradable sabor, ligeramente dulce, como a miel, del vermut por lo que le pedimos a la camarera que nos traiga la botella para mirar los ingredientes. El vermut que nos han servido es originario de Jerez de la Frontera, se llama Lustau y entre sus componentes encontramos ajenjo (planta medicinal digestiva), genciana (otra planta medicinal digestiva y de sabor amargo), cilantro y naranja. Ese toque de sabor dulce que hemos notado, se debe a que en su elaboración se ha incluido un vino con el PX algo dulce, vino de uva Pedro Ximénez.


Parece ser que el vermut rojo Lustau ha sido elegido como el mejor vermut en España en el año 2021 por la Asociación Española de Periodistas y Escritores del Vino.

Junto con el vermut nos han servido un aperitivo que consiste en una especie de gazpacho, con descargamento de miso, sobre el que han colocado una lámina de atún rojo. Increíblemente bueno.

Aperitivo de atún y miso

Al poco tiempo, la camarera nos ha ofrecido diversos panes ya cortado en rebanadas y nos hemos decidido por un pan de centeno y otro integral.

Pan de centeno e integral

Todos los entrantes que leemos en la carta tienen bastante buena pinta, nos surgen las dudas, pero nos toca decidir sobre un par de ellos y nos decantamos por probar unos raviolis de cocido, cuya pasta nos ha resultado cocida al dente y con un agradable relleno de carne de cocido y sobre los que la camarera ha vertido un caldo clarificado que le ha dado a los raviolis mucha jugosidad, aunque de sabor han resultado algo sosos.

Raviolis de cocido con su salsa

El otro entrante que nos ha parecido más interesante ha sido un arroz de caldero del Mar Menor, aderezado con unos toques de ali-oli de espirulina, que es una alga microscópica de color azulado e interesantes nutrientes y con varios pedazos de pargo, ese pez que se cría en aguas del Atlántico y también en piscifactorías. Como resultado, un plato de bonito color naranja con toques azulados y muy sabroso.

Arroz de caldero con ali-oli de espirulina

Siguiendo con el plato fuerte nos hemos decantado por el pescado, con un bacalao cocinado a Siguiendo con el plato fuerte nos hemos decantado por el pescado, con un bacalao cocinado  baja temperatura, pilpil de lemongrass (o te de limón) y miel, acompañado de unas espinacas a la catalana, con sus pasas y sus piñones aderezadas con un toque de miel, formando una combinación de sabores muy especial. Unir las lascas del bacalao con su pil pil, con el dulzor de la miel y las espinacas nos ha resultado un plato de lujo.

Bacalao y espinacas a la catalana

El otro plato fuerte ha sido un atún rojo Balfegó, considerado por algunos como el mejor atún rojo del mundo, atún rojo salvaje pescado en el Mediterráneo occidental y presentado sobre una crema de gazpachuelo malagueño con ralladura de raifort (rábano picante), plato igual o muy parecido al aperitivo que nos sirvieron junto con el vermut y que estaba delicioso.

Atún de Balfegó sobre gazpachuelo malagueño

Y los postres, en el día de hoy nos hemos decidido por una torrija de pan brioche con su crema de haba tonka, que es una semilla originaria de Centroamérica que conlleva un sabor especiado y dulce, acompañado de un helado de vainilla de Madagascar.

El otro postre ha sido una rosquilla con su cremoso de matalauva, acompañado de un helado de violeta. En una presentación espectacular, bajo una bola de algodón de azúcar encontramos una rosquilla, que ha resultado algo densa, sobre ella un helado de violeta y bajo la rosquilla una crema delicada y suave elaborada con esa hierba que tiene un cierto sabor a anís, la matalauva.


Rosquilla bajo nube de algodón de azúcar y torrija


Con relación a la señalización de los aseos, muy original y divertida, aunque hay que pararse un momento a pensar qué es lo que no están queriendo decir e interpretar el diseño de las figuras.