martes, 21 de mayo de 2019

CASA GALLETA: Discreta María.


CASA GALLETA, a 18 de Mayo de 2019, en la calle Castelló n.º 12 de Madrid, barrio Salamanca y muy cerca del Retiro, pulmón del foro que hay que cuidar y mucho.
Este sitio ha sido escogido, por las buenísimas sensaciones que nos generó la visita que hicimos hace dos años a otro restaurante de esta misma cadena, que se llama El Perro y la Galleta, y situados ambos muy cerca uno de otro. La proximidad del Retiro debe inspirar al grupo de restauración Fontaneda.
Entrada a Casa Galleta
En su página se anuncian como el restaurante más castizo del grupo Bar Galleta; será porque entre sus platos se encuentra la celebérrima tortilla de patata. Y que no falten los rebozados de galleta, en vez de pan rallado o harina, todo un invento.


Decoración de Casa Galleta con sus gramófonos
Si la decoración de El Perro y la Galleta nos entusiasmó, toda una pared llena de cabezas de perro de trapo de distintas razas, y ataviados con distintos disfraces, fue un espectáculo singular y divertido, en Casa Galleta destacan los gramófonos, botellas y muebles antiguos, y los retratos o esas cabezas de toro tejidas con esparto.
Como siempre, nos preguntan si queremos algo de beber, y nos pedimos unas cervezas fresquitas que vienen acompañadas con unas salsas de tomate natural, crema de olivas negras y mousse de setas, que nosostros saboreamos untando las rebanadas de pan. Entre crema y crema, ojeamos la carta. Como siempre, difícil la elección.


El aperitivo de cremas de tomate, aceitunas negras y setas
Pedimos para compartir unos entrantes, medias raciones, y como nos gusta probarlo todo, nos hemos decidido por las berenjenas rebozadas en galleta con pomodoro y parmesano. La presentación del plato es excelente, y un primer bocado resulta un poco soso, porque ese primer bocado coincide, lógicamente con el extremo de la berenjena, en donde no llega ni el tomate ni el queso, pero cuando se funde la berenjena con las lascas de queso parmesano y la salsa pomodoro (salsa de tomate con su ajo, cebolla y albahaca), resulta una combinación muy sabrosa. A destacar que no se notaba que la berenjena estaba rebozada en galleta María, porque no tenía un especial sabor dulce.
Las berenjenas con parmesano y pomodoro
El otro entrante que pedimos, y por recomendación del jefe de sala, las alcachofas confitadas con salsa romesco y parmesano. Nos sirven tres señoras alcachofas, buen tamaño, con lascas de parmesano por encima y sobre la salsa romesco. La salsa romesco podría semejarse a un salmorejo rojito, pero sus ingredientes son almendras tostadas, tomates y pimientos asados, con su aceite y vinagre. Me entusiasman las alcachofas, y éstas estaban estupendas. Y la salsa romesco, original y sabrosa.
Las señoras alcachofas con parmesano y salsa romesco
Como segundos platos nos hemos decantado por unos tacos de maíz con bacalao rebozado, aguacate y crema de pimiento del piquillo. Sobre el plato hay cuatro tortitas de maiz en forma de barco, y sobre ellas, un pedazo de bacalao rebozado en forma de bastón con suelo de aguacate y por encima, juliana de pimiento, cebolla morada y un toque de mayonesa. Con un ligero toque picante, resulta muy agradable al paladar.
Los tacos de bacalao
El otro segundo plato que pedimos es un arroz negro con alcachofas y tiras de sepia. Yo, que no soy de marisco, me ha resultado un plato muy sabroso e interesante, porque no sabía mucho a marisco, aunque tampoco destacaba el sabor de la alcachofa. Lo acompañaban con una ración de alioli.
El arroz negro con chipirones y alcachofas
Los postres, imprescindibles. Nos decidimos por los que incluyan galleta María, la reina del local, y la tarta de queso y la de chocolate lo incluyen. En la tarta de queso, como corresponde, la galleta María está en la base y el lateral, para que se arme. En el caso de la tarta de chocolate, en la base del vaso ponen una galleta, y sobre ella un poco de chocolate, otra galleta, otro poco de chocolate, ... hasta terminar con una galleta. Un poco empalagosa y contundente.

La tarta de queso 
La tarta de chocolate
Y una vez que terminamos, nos damos cuenta de que casualmente, hemos repetido los mismos postres que comimos en El Perro y La Galleta. Y también el plato de los tacos de maíz con bacalao. Interesante, porque nos gusta experimentar cocinas y platos distintos, y en este caso, sin pretenderlo, hemos repetido.                                                             Curioso.
En cuanto a la señalización de los baños, sin comentarios porque está repetido con otro restaurante, la primera vez que ocurre. Sólo decir que muy serio para un restaurante tan divertido, a la vez que vintage. Como está repetido, no aporto foto.